Un bronceado diez
Llega el verano y muchos de nosotros queremos lucir una piel bronceada, suave y de aspecto saludable. Muchas veces, parece una contradicción, ¿verdad? Sin embargo, todo depende de cómo llegues a conseguir el moreno.
No hay que olvidarse que el bronceado solo es una manifestación del mecanismo de defensa de la piel. La obsesión por estar moreno en algunas personas tiene características similares a la de los pacientes con diversos comportamientos adictivos. Por eso, como en muchos aspectos de la vida, la moderación es la clave. Nosotros te vamos a dar 5 consejos para poder conseguirlo…
Consejos para conseguir el mejor bronceado en verano
1. Protégete. Cuando hablamos de broncearnos, muy pocas veces tenemos en cuenta la salud de la piel. Una exposición prolongada a las radiaciones solares tendrá consecuencias negativas en la misma, ya que los rayos UVA y UVB perjudican a nivel inmunológico, del ADN celular de la piel, antioxidante y del fotoenvejecimiento.
El uso del protector solar se vuelve no sólo aconsejable, sino obligatorio. Los distintos filtros físicos, químicos y biológicos impiden que nuestra piel, en las diferentes capas de esta, se vea afectada por los efectos dañinos de las radiaciones solares, y permiten que la piel se broncee de una forma progresiva.
2. Evita exponerte al sol las horas centrales del día, cuando los rayos solares inciden con mayor intensidad.
3. Cuidado con los “trucos caseros”, ya que no son otra cosa que mejunjes que, cuanto menos, podrían provocar quemaduras en la piel. Aceite de oliva, de girasol o de coco, manteca de cerdo, zumo de limón, ¡incluso Coca-Cola! Ante todo, debemos tener cierto sentido de la responsabilidad.
4. Elige tu fotoprotector en función del fototipo de tu piel con el fin de conseguir un bronceado gradual y saludable.
5. Aplícalo media hora antes de la exposición. Además, no olvides hidratarte y utilizar un sombrero o gorro.
Consejos para prolongar el bronceado
Empieza con una hidratación profunda diaria, mañana y noche. Con ello evitaremos que la piel se seque y se descame más rápidamente. Para el rostro la zona más expuesta y delicada, serums hidratantes y tratamientos adecuados para cada tipo de piel con componentes que favorezcan la retención de agua en la epidermis.
Exfoliar la piel por lo menos una vez por semana. Mediante Ácido Glicólico y otros AHA naturales (Ácido Láctico, Cítrico y Tartárico) que disuelven las células muertas y promueve la renovación celular. Nos ayudará a mejorar el proceso de renovación, esto logrará un tono más uniforme. Y conseguiremos también ayudar a que la hidratación posterior sea más eficaz.
No olvides que tu dieta puede ser una buena aliada. Añade alimentos ricos en betacarotenos y en vitamina C. Están en frutas y verduras como la zanahoria, el tomate, la lechuga, la naranja, el pomelo, etc. Te ayudarán a conseguir un tono más bonito.
Y por supuesto, mientras puedas aprovecha los días soleados para pasear y hacer cualquier actividad al aire libre. De esta forma ayudarás a mantener un ligero tono bronceado. Eso sí, ¡no te olvides nunca de tu protección solar!
Estas podrían ser algunas pautas que podemos seguir para mantener nuestro bronceado, pero si lo que queremos es que se alargue todavía por mucho más tiempo y este otoño lucir una piel bonita y bronceada, tenemos a nuestra disposición diferentes productos avalados por estudios científicos que potencian el bronceado, como Heliocare Bronze. Unas cápsulas que estimulan de forma directa la producción de melanina gracias al forskolin e intensifican el bronceado, al tiempo que la protegen gracias a la actividad antioxidante y fotoprotectora de su activo principal, el Fernblock.
Si quieres lucir una piel bonita y bronceada, no te la juegues. Un producto mal elegido podría fastidiarnos el resto del verano.