Tratamientos para mejorar el aspecto de la piel tras el verano

A la hora de planificar los distintos tratamientos médicos y estéticos que realizamos de manera habitual, uno de los factores limitantes -probablemente el más importante- que nos encontramos es la exposición solar. Por ello, cuando esta exposición va a ser alta, sobre todo a partir de junio, posponemos algunos tratamientos para después del verano.

Tras el verano, aunque nos hayamos cuidado, las manchas generalmente se oscurecen y se hacen más evidentes, por lo que aumenta la demanda de tratamientos para lentigos y también para el melasma.

Hoy hablamos de los lentigos, el melasma, la cuperosis y las cicatrices de acné, así como de la importancia de elegir la protección solar adecuada para cuidar nuestra piel en cada caso:

Cómo tratar los lentigos solares

Los primeros se tratan con muy buenos resultados con láser, aparece una costra que dura unos días, y posteriormente un eritema (enrojecimiento) que irá desapareciendo. Solemos recomendar cremas antiinflamatorias y regeneradoras para los primeros días y, posteriormente, un protector solar de amplio espectro.

Cómo prevenir el melasma

En el caso del melasma, tanto si realizamos sólo un tratamiento con fórmula despigmentante como si se realiza un tratamiento más potente en clínica (combinación de láser y máscara despigmentante) recomiendo el uso de protector solar que incluya filtro para la luz azul (la que emiten las pantallas, algunos fluorescentes…), ya que se ha visto que este tipo de luz empeora el melasma.

En los últimos años se ha demostrado la utilidad del ácido tranexámico, tanto tópico como oral, para el tratamiento de esta patología.

Heliocare 360º Pigment Solution Fluid SPF 50+ es un fotoprotector avanzado antimanchas que ofrece protección de amplio espectro (UVB, UVA, HEVL e IR-A) reforzada frente a la radiación UVA y Visible, incluida la luz azul emitida por dispositivos electrónicos. Con Fernblock, activos reparadores y un complejo despigmentante formado por Niacinamida y Ácido elágico, es la fotoprotección ideal para prevenir las manchas y potenciar los tratamientos despigmentantes. Su fórmula ultraligera tiene pigmentos nude que, sin aportar color, se mimetizan con la piel y unifican el tono ayudando a disimular las imperfecciones.

Cómo tratar la cuperosis

Algo parecido ocurre a los pacientes con cuperosis, que pueden ver cómo el calor del verano produce un empeoramiento de las rojeces faciales, haciéndolas más evidentes y molestas. Gracias al láser vascular se consigue una mejoría tanto estética como sintomática, con un tiempo de recuperación tras el tratamiento generalmente de pocos días.

Estos pacientes, generalmente con “piel sensible”, se beneficiarán de protectores solares minerales y de productos específicos, preferiblemente formulados como sérums o geles.

Heliocare 360º Mineral Tolerance Fluid SPF 50 es un fotoprotector de alta tolerancia formulado con filtros exclusivamente minerales, perfecto para pieles sensibles, reactivas e intolerantes. Con Fernblock®+, filtros físicos y activos reparadores, protege frente a las 4 radiaciones, neutraliza y repara el daño solar. Su textura ligera permite obtener un acabado invisible incluso en pieles oscuras.

Tratamiento para las cicatrices de acné

El otro tratamiento estrella tras el verano es el de las cicatrices atróficas (“hundidas”) de acné, ya que por el riesgo de hiperpigmentación con el uso de algunos láseres (sobre todo fraccionados ablativos), se suelen comenzar o retomar estas sesiones a partir de septiembre u octubre.

Aunque hay varias técnicas, láseres y dispositivos capaces de mejorar las cicatrices, el que más empleo es el láser de CO2, que hace pequeñas “heridas” en las zonas afectadas dejando zonas de piel sana alrededor, favoreciendo la síntesis de nuevo colágeno y, por tanto, la mejoría de estas depresiones. Dependiendo de la extensión de las lesiones y la energía utilizada, el tiempo de recuperación es variable entre 3-7 días, durante los cuales recomendamos cremas reparadoras, en ocasiones combinadas con antibióticos tópicos, así como protección solar estricta con fotoprotectores específicos para pieles acneicas (no comedogénicos, oil-free…).

En determinados pacientes de fototipos altos también indicamos productos para prevenir la pigmentación postinflamatoria, generalmente con ácido tranexámico en su composición.

Heliocare 360º Gel Oil-Free SPF 50 es un gel fotoprotector específico para pieles grasas o con tendencia acneica. Con Fernblock, glicosilasas y un complejo con doble acción matificante-seborreguladora ofrece una protección de amplio espectro, con un acabado mate y seco al momento. Si además quieres cubrir las imperfecciones, la versión con color Heliocare 360º Gel Oil-Free Color SPF 50+ está disponible en 3 tonos, con textura fluida para conseguir un acabado natural y unificador del tono, dejando la piel suave, hidratada, luminosa y sin brillos.