Protección solar en niños ¿Qué debemos saber?, por la Dra. Lidia Maroñas
Hoy tenemos la suerte que nos visite para hablar de fotoprotección y niños la Dra. Lidia Maroñas, médico especialista en Dermatología en el Hospital Universitario 12 de Octubre y Clínica Dermatológica Internacional de Madrid.
Miembro de la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV), del Grupo Español de Dermatología Pediátrica (GEDP), del Grupo Español de Investigación ETS y SIDA, del Grupo Español de Linfomas Cutáneos (GELC), del Colegio Ibero-Latinoamericano de Dermatología (CILAD), del Capítulo de Dermatólogos Jóvenes del CILAD, de la European Academy of Dermatology and Venereology (EADV), de la International Dermoscopy Society (IDS).
A la Dra. Maroñas, le encanta poder compaginar la asistencia clínica de pacientes, con la docencia de estudiantes de Medicina de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) y la investigación. Adscrita al Grupo de Investigación Clínica y Traslacional en Oncología Cutánea del Instituto de Investigación Sanitaria i+12, la doctora mantiene una importante producción científica y actualmente desarrolla su Tesis Doctoral en la UCM sobre cáncer cutáneo. Le gusta superarse a sí misma, cree en la constancia del trabajo diario para mejorar y disfruta proponiéndose nuevos retos, entre ellos su recién estrenado blog Derma&Millennials que os animamos seguir si queréis estar informados de las principales novedades científicas en el campo de la dermatología.
Muchos padres nos preguntan cómo deben afrontar los próximos meses de juegos al aire libre, piscina y castillos en la playa para que sus niños puedan disfrutar del sol estando bien protegidos. Vamos a intentar responder a sus dudas más habituales:
¿Puedo ir a la playa con un bebé?
Los niños pequeños y especialmente los lactantes son muy sensibles a la radiación solar, se queman con facilidad y hasta pueden deshidratarse. En bebés menores de 6 meses, no se recomienda la exposición directa a la luz solar ni la aplicación de fotoprotectores por lo que, salvo a última hora del día, es preferible evitar llevarlos a la playa.
¿Qué crema solar es mejor para el niño?
Existe una gran variedad de fotoprotectores en el mercado con presentaciones en forma de leche, crema, spray o loción, que deben elegirse en función de las características de la piel y las preferencias de cada persona. En niños menores de 2-3 años y en aquellos con patologías cutáneas están especialmente indicados las cremas con filtros minerales, que protegen del sol con pantalla total al actuar como una barrera física sin ser irritantes ni sensibilizantes. Actualmente, este tipo de fotoprotectores ha mejorado considerablemente su cosmética para evitar el fastidioso efecto de “piel blanca”. En los niños más mayores se pueden utilizar cremas solares infantiles con filtros químicos/orgánicos que contengan un factor de protección de al menos 30. Este tipo de fotoprotectores tarda en empezar a actuar por lo que se recomienda aplicarlos unos 20-30 minutos antes de salir de casa.
¿Es suficiente con la crema de protección solar?
Depende de la edad, de las condiciones de la exposición solar y de la forma en que utilicemos el nuestras cremas de protección solar. En general, tanto en niños como en adultos siempre es recomendable utilizar medidas físicas contra el sol, como ropa clara y holgada, gorro y sombrilla. Esto es fundamental en los niños más pequeños y en los lactantes. Debemos evitar la exposición solar directa durante las horas de máxima radiación (12-17 horas) y algo muy importante que se suele olvidar: la crema fotoprotectora debe aplicarse en cantidad generosa y ser renovada de forma periódica (cada 2 ó 3 horas), especialmente tras el baño o en momentos de mayor sudoración.
¿Alguna recomendación especial para niños con dermatitis atópica (DA)?
Los niños con atopia han de seguir las mismas indicaciones sobre protección solar que cualquier niño de su misma edad. En general, recomendamos la utilización de fotoprotectores infantiles específicos para DA y, en épocas de piscina, intensificar la hidratación de la piel con lociones emolientes para pieles atópicas.
Aunque nos acordemos más de él cuando llega el verano, el sol nos acompaña los 365 días del año. Adquirir un buen hábito de protección solar diaria desde la infancia es esencial para prevenir el envejecimiento prematuro de la piel y el desarrollo de cánceres cutáneos en la edad adulta.