La Vitamina del Sol

Que largo se nos hace el invierno ¿verdad?

Querido Sol te echamos de menos…

Paseos por el campo, amaneceres de primavera o verano, ¿a qué nos levantamos con otro ánimo con esa luz…?

Sabéis que desde “Vida al Sol” nos gusta hacer hincapié, en la obligación que tenemos de disfrutar del Sol de una forma responsable y con protección. Actuamos como vuestra conciencia advirtiéndoos de los efectos más perjudiciales de la radicación solar.

Pero, es indudable, el Sol es fuente de vida y responsable de innumerables beneficios.

Queremos hablaros de uno de esos beneficios que produce en nuestro organismo. Hoy hablamos de la vitamina D, también conocida como la vitamina del sol.

Lo que conocemos como vitamina D fue descubierta por Sir Edward Mellanby en 1919. Es un grupo de vitaminas liposolubles es decir que se disuelven en grasas y que pueden presentarse en varias formas (D1, D2, D3, D4 y D5). Las formas principales son la D2 y la D3. La vitamina D2 se encuentra en fuentes vegetales, mientras que la D3 deriva de fuentes animales y de una reacción cutánea en la que es imprescindible la presencia de luz ultravioleta.

La vitamina D tiene un papel esencial para el buen funcionamiento del organismo, se define como un marcador de salud general ya que participa en procesos tan importantes como la absorción y el mantenimiento de los niveles de calcio y el funcionamiento de los músculos.

Una deficiencia de esta vitamina puede provocar enfermedades como el raquitismo y la osteomalacia, e incluso la osteoporosis.

¿Cómo se produce la Vitamina D?

Como decíamos la presencia de la vitamina D en nuestro organismo puede proceder de determinados alimentos como el pescado azul, la mantequilla, yema de huevo, leche… aunque es prácticamente imposible ingerir la cantidad suficiente con la alimentación. La forma más eficiente es tomando el sol. Las radiaciones solares permiten que nuestro organismo sintetice esta vitamina, por lo que se convierte en un aliado fundamental para nuestra salud.

Entonces…¿Esto significa que podemos exponernos a las radiaciones solares sin ningún tipo de protección y de forma continuada? ¡NO!

Bastan 15 minutos al sol al día para sintetizar la cantidad recomendada de vitamina D.

En definitiva el Sol nos proporciona salud y bienestar, siempre que nos expongamos de manera responsable. Un consejo, Pasa más tiempo al aire libre utiliza un fotoprotector adecuado para tu fototipo y compleméntalo con Heliocare® Ultra D que te aportará la cantidad diaria recomendada de vitamina D para mantener los huesos fuertes y sanos. ¡El secreto de una vida más sana es mucho más fácil de lo que pensamos! 😉