¡Desnúdate y Revisa tus lunares! por la Dra Lidia Maroñas

Hoy hablamos de cáncer de piel y de consejos de fotoprotección con la Dra. Lidia Maroñas, médico especialista en Dermatología en el Hospital Universitario 12 de Octubre y Clínica Dermatológica Internacional de Madrid.

Miembro de la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV), del Grupo Español de Dermatología Pediátrica (GEDP), del Grupo Español de Investigación ETS y SIDA, del Grupo Español de Linfomas Cutáneos (GELC), del Colegio Ibero-Latinoamericano de Dermatología (CILAD), del Capítulo de Dermatólogos Jóvenes del CILAD, de la European Academy of Dermatology and Venereology (EADV), de la International Dermoscopy Society (IDS).

A la Dra. Maroñas, le encanta poder compaginar la asistencia clínica de pacientes, con la docencia de estudiantes de Medicina de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) y la investigación. Adscrita al Grupo de Investigación Clínica y Traslacional en Oncología Cutánea del Instituto de Investigación Sanitaria i+12, la doctora mantiene una importante producción científica y actualmente desarrolla su Tesis Doctoral en la UCM sobre cáncer cutáneo. Le gusta superarse a sí misma, cree en la constancia del trabajo diario para mejorar y disfruta proponiéndose nuevos retos, entre ellos su recién estrenado blog Derma&Millennials que os animamos seguir si queréis estar informados de las principales novedades científicas en el campo de la dermatología.

El verano ya está encima y con él los meses de mayor exposición solar. No son pocos los pacientes que acuden a nuestra consulta para revisar sus lunares por primera vez y es que más del 50% de los españoles afirma no haber acudido nunca al dermatólogo… Hace escasas semanas daba inicio la campaña Euromelanoma 2018 con el lema: “Desnúdate y revisa tus lunares”, precisamente para concienciar a la población sobre la importancia de la prevención en la lucha contra el cáncer de piel.

El cáncer de piel puede afectar a personas de cualquier edad, si bien es cierto que suele aparecer en mayores de 50 años o en personas sometidas a una prolongada exposición solar. La piel tiene memoria y el daño producido por el sol tiene un efecto acumulativo al producir alteraciones celulares y mutaciones irreversibles en el ADN. Esta científicamente demostrado que la utilización de fotoprotectores es eficaz y consigue disminuir el daño celular producido por los rayos ultravioleta. Esto es especialmente importante en los niños, pues las quemaduras solares sufridas en la infancia constituyen un factor de riesgo reconocido de melanoma, uno de los tipos más agresivos de cáncer de piel.

Siguiendo unos sencillos consejos, muy fáciles de llevar a cabo en la rutina diaria, puedes disfrutar del verano sin descuidar tu piel:

1. Utilizar productos fotoprotectores de forma diaria, que cubran UVB con un factor de al menos 30+, que sean activos frente a la radiación UVA y que contengan antioxidantes para disminuir el estrés oxidativo ocasionado por la luz visible e infrarroja. ¡No te olvides re-aplicarlo cada 2-3 horas y proteger tus labios con sticks fotoprotectores!
2. Ponte crema fotoprotectora cuando vayas a hacer deporte al aire libre. Sin darnos cuenta, podemos pasar varias horas expuestos al sol.
3. Protege tu piel con ropa, sombrero y gafas de sol. Evita la exposición solar directa entre las 12 y las 17 horas y lleva siempre sombrilla a la playa.
4. Si tienes bebés en casa, no los lleves a la playa en las horas centrales del día. A los niños más mayores, edúcales sobre la importancia de echarse crema y protegerse del sol para que desarrollen hábitos saludables para el cuidado de su piel desde la infancia.
5. ¡Desnúdate! Vigila tus lunares y vigílaselos a tus seres queridos. La autoexploración de toda la piel en casa es uno de los pilares fundamentales para la detección precoz. Siguiendo la regla ABCD (A, Asimetría; B, Bordes irregulares; C, Color heterogéneo; D, Diámetro mayor de 6 mm) puedes identificar el “patito feo” y acudir de inmediato al médico.
6. Consulta al dermatólogo. Igual que nos hacemos revisiones de salud por otros motivos, es clave acudir al especialista de la piel para chequearse los lunares al menos una vez al año. En personas crónicamente expuestas al sol o con riesgo aumentado de cáncer de piel las revisiones han de ser aún más frecuentes. Contamos con herramientas específicas, como la dermatoscopia digital, que nos permiten hacer un seguimiento exhaustivo y detectar cambios evolutivos de forma precoz.