Los beneficios del sol

No nos cansaremos de advertir de los efectos más perjudiciales del sol. Envejecimiento prematuro de la piel, daños en el ADN cutáneo, aparición de radicales libres, etc. Pero, ¿qué pasa con los beneficios del astro rey?

Está claro que los rayos del sol son responsables de la vida en nuestro planeta. Además de los ejemplos más claros, como el de la fotosíntesis de las plantas, existen otros muchos que están directamente relacionados con nuestra supervivencia y bienestar. Repasemos algunos de ellos:

– Las radiaciones solares nos permiten sintetizar la vitamina D. ¿Qué significa esto? Nuestro cuerpo, por sí solo, no es capaz de producir ni asimilar la vitamina D que ingerimos con los alimentos. Sin embargo, los rayos del sol nos permiten generarla en cantidades suficientes para regular los niveles de calcio y fósforo en sangre. De hecho, ¡basta con exponerse al sol 15 minutos al día!

– El sol nos ayuda a reducir los niveles de colesterol. Gracias a los rayos UVB, podemos metabolizar el colesterol y evitar que se pegue a nuestras arterias.

– La exposición a los rayos solares nos permite mejorar algunos problemas de la piel, como el acné y la psoriasis.

– El sol reduce la presión sanguínea al dilatar los vasos de nuestro organismo.

– Los rayos del sol aumentan los niveles de serotonina, neurotransmisor responsable de que nos sintamos más felices y de buen humor. Además, aumentan la testosterona y la melatonina, hormonas relacionadas con el apetito sexual y la regulación del sueño, respectivamente. ¡Por eso en verano dormimos mejor!

Seguro que has notado que, cuando tomas el sol, te sientes mejor. Nuestra estrella más cercana nos proporciona salud y bienestar, siempre que nos expongamos de manera responsable. Evita las horas centrales del día en verano, utiliza un fotoprotector adecuado para tu fototipo y protege la piel más sensible con prendas como sombreros. ¡El secreto de la felicidad está más cerca de lo que pensamos!